Ayer me propuse chingarme parte de mi quincena en uno de mis multiples vicios el cual es "APOSTAR", la verdad haciendo cuentas creo que he perdido más de lo que he ganado ya que soy de los cabrones de esos machos, como los de antes así chingones que no se miden, que se la juegan de todas, pero la verdad luego hasta en calzones me ando quedando.
Aquí en mi pueblo hay pocos casinos, pues casi siempre los abren y clausuran por que no se mochan con los de arriba (Viva México).
En fin para no aburrirlos que me siento (en una silla), me pido mis cheves y tabacos y empiezo a jugar, ya que me metieron una putiza y yo medio pedo y teniendo en la mente que entro a trabajar a las 9:00 a.m., me fijo en la cartera y solo quedaban $350 pesos de los cuales menos el estacionamiento quedarían solo $325 o sea ya vali verga...
Pero como quedamos que soy como los del viejo Oeste lo apuesto todo y resulta que la suerte me sonrie y esta vez me los chingo, recupere mi lana y un chingo más, así que valiendome madres y sintiendome James Bond en esos momentos, ya pedí mi martiny agitado no revuelto y un puro (la neta fueron unos Torres y unos camel jajaja), y seguí apostando....
Ahora estoy en el trabajo bien crudo, llegue tarde pero con billetes y solo espero la hora de comida para refinarme unos camarones y en la noche volver a ir a apostar: ESTA VEZ CON SU LANA Y DE MAC PATO....
1 comentario:
El domingo el novio quiso entrar a un casino porque nunca había ido y teníamos media hora libre (empezaba una peli). Después de apurar a la amable señorita que nos explicaba y nos explicaba nos quedaban 15 minutos. Nunca entendí que chintrolas era ni cómo pasó pero cuando ya queríamos perder porque empezaba la película en el último juego ganamos. Fue poco más del doble lo que apostamos (veinte pesos XD) pero se siente bien chido.
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